Los síntomas cáncer de útero muchas veces pueden ser confundidos con otras enfermedades no cancerosas.  Además, este cáncer puede localizarse en el cuello del útero o en los tejidos, y tiene diferentes nombres como cáncer de cérvix o cáncer de endometrio.  Es importante conocerlos, ya que se encuentran entre los cánceres más frecuentes en las mujeres a nivel global.  Si perteneces al grupo de riesgo y adviertes algún síntoma… ¡no lo dejes pasar!

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Qué es el cáncer de útero o endometrial

Repasemos brevemente nuestros conocimientos sobre el útero.  El útero es un órgano hueco que sirve para albergar el feto durante el embarazo.  Está revestido por un tipo de tejido glandular llamado endometrio.

Durante la etapa fértil, todos los meses el endometrio crece y se engrosa, preparándose para recibir un óvulo fertilizado.  Si esto no sucede, el revestimiento se elimina mediante la menstruación.

La conexión entre el útero y la vagina es el cuello uterino o cérvix.  Según el lugar donde se desarrollen las células cancerosas, estaremos frente a un cáncer de útero o cáncer endometrial, y cáncer de cuello uterino, cáncer de cérvix o cáncer cervical.

Según la Sociedad Española de Oncología Médica, el cáncer de endometrio es el más frecuente entre los del aparato genital de las mujeres.  En forma global está en el cuarto lugar entre los cánceres más frecuentes entre las mujeres.

Como el cáncer de endometrio es el tipo más común de los cánceres del útero, cuando se habla de cáncer de útero generalmente se refiere a cáncer de endometrio.

Factores de riesgo del cáncer de útero

Antes de detallar los síntomas cáncer de útero es importante conocer los factores de riesgo, es decir, qué condiciones harían más posible el desarrollo de un cáncer de útero.

Para comenzar, es más frecuente entre las mujeres mayores, después de la menopausia, debido a que los cambios hormonales en esta etapa producen un crecimiento del tejido endometrial.    De hecho la mayoría de los casos de cáncer de endometrio se produce en mujeres de 60 a 70 años de edad.

Otros factores de riesgo son:

• Recibir terapias de reemplazo hormonal con estrógeno solo: estas terapias se aplican para tratar los síntomas de la menopausia, pero carecen de otra hormona necesaria como es la progesterona.
• Menopausia a mayor edad: las mujeres que comienzan la menopausia después de los 55 años están en mayor riesgo de desarrollar cáncer de endometrio.
• Menarca a menor edad: las mujeres que tienen su primera menstruación antes de los 12 años también están en mayor riesgo de desarrollar cáncer de endometrio.
• En general falta de exposición al estrógeno: los casos anteriores, como la infertilidad o el no haber estado nunca embarazada son factores predisponentes debido a que el organismo no ha generado estrógenos.
• Obesidad: La obesidad y el sobrepeso aumentan de dos a cuatro veces el riesgo de desarrollar cáncer de útero.
• Diabetes e hipertensión arterial: también aumentan las posibilidades de desarrollar cáncer de útero independientemente del peso.
• Otras afecciones y enfermedades: enfermedades que alteran el equilibrio entre los niveles hormonales de estrógeno y progesterona pueden engrosar el endometrio y facilitar el desarrollo de células cancerosas.  Esto puede suceder si padeces síndrome de ovario poliquístico, pólipos endometriales o tumores ováricos y si estás recibiendo terapia hormonal para tratar el cáncer de mama.

Síntomas cáncer de útero

Es importante saber que no todos los síntomas asociados al cáncer de útero equivalen a estar desarrollando esta enfermedad.  Es más, muchos pueden ser causados por ejermedades no cancerosas.

Sin embargo, sólo un examen médico completo podrá determinar a qué se deben esos síntomas cáncer de útero, otros cánceres o enfermedades no cancerosas.

El síntoma más común es el sangrado o manchado vaginal después de completada la manopausia, es decir, unos 12 meses sin menstruaciones.

Otros síntomas son:

• Secreción blanca o blanquecina en la menopausia.
• Sangrado entre menstruaciones o menstruaciones que duran más de lo normal.
• Menstruación muy abundante o de larga duración después de los 40 años.
• Dolor en el abdomen bajo.
• Dolor al mantener relaciones sexuales.
• Resultados anormales en la prueba de Papanicolau (síntoma raro).

Por qué es importante la detección temprana

Los síntomas cáncer de útero no son detectables en forma precoz como sucede con el cáncer de cuello uterino que puede ser detectado mediante la prueba de Papanicolau y otros cánceres.

En realidad, gracias a este tipo de pruebas la incidencia de estos cánceres ha disminuido mucho, pero aún no se ha desarrollado alguna prueba que permita detectar tempranamente el cáncer de útero o endometrio.

Los síntomas cáncer de útero son uno de los pocos avisos que envía tu organismo para alertar acerca del desarrollo de un cáncer de endometrio.

Tampoco hay muchas posibilidades de prevenir este tipo de cáncer, pero sí se pueden reducir los factores de riesgo como por ejemplo mantener un peso saludable y hacer ejercicio.

Si debes recibir terapias hormonales de reemplazo con estrógenos, te recomendamos analizar cuidadosamente con tu médico los pro y los contra.

Actualmente los estrógenos están disponibles en muchas formas diferentes como comprimidos, parches, cremas, inyecciones u óvulos y la mayoría de las veces se consideran una opción para mitigar los síntomas de la menopausia.

Sin embargo, consulta con tu médico ya que las terapias con estrógenos suelen combinarse con medicamentos que contienen progesterona para restablecer el equilibrio hormonal, pero en este caso pueden favorecer el riesgo de padecer cáncer de mama.

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