Tradicionalmente relacionado con la alimentación de pájaros, las propiedades del mijo tanto alimenticias como medicinales están convirtiendo a este cereal en un verdadero aliado de la alimentación saludable. Su utilización puede ir mucho más allá que simplemente consumir las semillas agregadas a panificados o ensaladas. ¿Quieres saberlo todo acerca del mijo? ¡Sigue leyendo!
Esto te interesará: Cereales a incorporar en la dieta
Las propiedades del mijo se deben a su composición
Las propiedades del mijo, tanto desde el punto de vista medicinal como alimentario, se deben a su extraordinaria composición. Pero antes de entrar en este tema, recordemos que el consumo de mijo es mucho más antiguo que el de otros cereales. Aunque actualmente la mayor parte de la producción se destina a la alimentación de animales, especialmente pájaros, su popularidad ha ido en aumento en los últimos años.
El mijo es una gran fuente de energía: 100 gr. de mijo aportan 378 Kcal. Más del 73% del grano está compuesto por carbohidratos; también contiene fibra soluble (8.5%), proteínas (11%), grasas (4,22%) y agua (8%). Es muy rico en minerales como potasio, magnesio, fósforo, hierro, zinc, manganeso y selenio, y en vitaminas del grupo B, especialmente B9, y vitamina E.
Propiedades medicinales del mijo
El mijo es un cereal altamente energético y reconstituyente. Muchas veces se lo compara con el arroz integral; en realidad, es más rico en proteínas y grasas saludables.
La incorporación de mijo a la dieta es beneficiosa para las personas con diabetes, ya que los hidratos de carbono son de absorción lenta y no provocan aumentos súbitos de glucosa en la sangre. Además su contenido en fibra ayuda a la regulación de los niveles de azúcar en la sangre.
Es un cereal sin gluten como bien lo explica el GIG, por lo que es ideal para la alimentación de las personas celíacas y sus propiedades reconstituyentes favorecen la formación de una flora intestinal saludable.
Es recomendado para la dieta de personas con colesterol alto ya que es una fuente energética de grasas cardiosaludables. Y también para quienes padecen depresión, cansancio, estrés, astenia o pérdida de memoria debido a su contenido en ácidos grasos esenciales, como el ácido linoleico y ácido linolénico, necesarios para el funcionamiento del sistema nervioso.
También para quienes padecen sobrepeso y obesidad, ya que la fibra soluble no aporta prácticamente calorías y aumenta la sensación de saciedad.
Debido a su alto contenido en minerales, se recomienda incorporarlo a la dieta de personas con deficiencias de hierro, fatiga, depresión o falta de memoria. El mijo contiene más magnesio y proteínas que otros cereales, por lo que está indicado para deportistas y personas sometidas a desgaste físico.
En general las propiedades del mijo lo convierten en un aliado para reforzar el sistema inmunológico, tonificar el sistema nervioso, regeneración de la piel y masa muscular y generación de estados de bienestar a nivel cerebral y glandular.
Propiedades del mijo en la alimentación
El mijo puede consumirse de múltiples formas. Tiene un sabor neutro y suave. Es un grano pequeño, y comercialmente se pueden encontrar distintas variedades que a su vez influyen en las propiedades del mijo para la alimentación. Debe conservarse en lugares frescos, oscuros y secos.
- El mijo refinado es de color blancuzco y grano más grande. Se utiliza en reemplazo del arroz pero tiene menos nutrientes debido al proceso de refinado.
- El mijo dorado es sabroso, ideal para consumir solo o agregado a ensaladas o sopas.
- El mijo rojo es el destinado a la alimentación de aves y animales de granja.
- El mijo perla se está convirtiendo en uno de los preferidos frente a las otras variedades. En África, Asia e India es un alimento básico.
Se utiliza en preparaciones dulces y saladas, como harina (recuerda que no tiene gluten), cereal para el desayuno o sus brotes para consumir en ensaladas.
La forma de cocción ofrece distintas texturas. Básicamente debe combinarse con el doble de agua que de cereal y su tiempo de cocción es de aproximadamente 25 minutos. Cuando hierve se debe reducir el fuego y dejar cocinar lentamente. Si no se remueve durante la cocción se obtienen granos esponjosos de textura parecida al arroz. Si, en cambio se lo remueve y agrega agua extra, se obtiene una preparación similar a un puré de papas.
Recetas con mijo
La mejor forma de aprovechar las propiedades del mijo es incorporarlo a la dieta en sus múltiples posibilidades. Analiza estas recetas:
Vegetales salteados con mijo
- Ingredientes: 100 gr. de granos de mijo, una cebolla, 2 pimientos verdes, 2 zanahorias, 4 champiñones granes, 2 rodajitas de jengibre, cilantro, sal, aceite de oliva virgen extra.
- Preparación: hervir el mijo a fuego lento durante aproximadamente 40 minutos. Mientras tanto lavar los vegetales, cortarlos en trozos pequeños y saltearlos en el aceite de oliva. Dejar reducir el líquido de cocción. Escurrir el mijo, mezclar con los vegetales y servir.
Ensalada de mijo y vegetales
- Ingredientes: 150 gr. de mijo, 1 litro de caldo de verduras, 2 dientes de ajo, 50 gr. de vegetales de hoja verde cruda (lechuga, radicheta, rúcula), 4 espárragos, 40 gr. de tomates, 100 gr. de tofu, 2 cucharadas de mostaza, vinagre, aceite de oliva virgen extra, sal.
- Preparación: Utilizar una cazuela. Saltear los dientes de ajo y retirar. En el mismo aceite saltear los granos de mijo hasta que comiencen a dorarse y saltar, en ese momento agregar el caldo de verduras. Dejar hervir 30 minutos y agregar los ajos salteados. Cuando esté cocido, escurrir y dejar enfriar. Aparte preparar una ensalada con los vegetales y el tofu. Aderezar con una vinagreta preparada con la mostaza. Mezclar todo en una ensaladera y servir.
Postre de mijo y soja
- Ingredientes: 100 gr. de copos de mijo, 50 gr. de harina de mijo, 750 ml. de bebida de soja, azúcar y canela.
- Preparación: la preparación debe realizarse unas seis horas antes de consumir. Mezclar en un bol los copos de mijo con ½ litro de bebida de soja, aromatizar con canela y dejar hidratar. Calentar un poco la mezcla agregando el resto de bebida de soja y endulzar con azúcar. Si se desea una textura más espesa agregar la harina de mijo. Verter en boles individuales, dejar enfriar en el refrigerador. Al momento de servir aromatizar con canela.