Anteriormente ya hablamos en Alimentos Ricos sobre los diferentes tipos de leche, sus beneficios y los mejores consejos para elegir la que mejor se adapta a ti. Hoy vamos a profundizar en una de ellas, concretamente en la leche de avena, una de las que más interés ha adquirido en los últimos años y cuyo consumo se ha disparado gracias a sus excelentes propiedades, su delicioso sabor y la posibilidad de prepararla nosotros mismos en casa.
La leche de avena es una de las bebidas más completas, ideal para personas que presenten intolerancia a la lactosa, pero también para quienes busquen maximizar las propiedades de la leche o simplemente para aquellos a los que el sabor de la leche sola no les guste demasiado. Apenas existen contraindicaciones de esta bebida, tan solo debes cuidar su consumo si eres celíaco, revisando bien la etiqueta para comprobar que la avena empleada en su elaboración no contiene glúten.
¿Qué es la leche de avena y de dónde se obtiene?
La leche de avena es un tipo de leche vegetal que se obtiene con la combinación de aceite de girasol, sal marina, agua y avena integral. La mayoría de las grandes marcas de leche ya han sacado una línea especial de esta bebida de avena, enriquecida además con otros minerales o vitaminas como el calcio y las vitaminas A y D, las más comunes en este tipo de productos.
Resulta curiosa su denominación, ya que en realidad sería más correcto llamarla «bebida de avena» en lugar de «leche de avena» debido a que como has visto en la introducción de este apartado, en su elaboración no aparece la leche en sí en ningún momento. Precisamente su origen vegetal y no animal es la principal causa por la que la leche de avena es una de las preferidas por los vegetarianos.
Propiedades y beneficios de la leche de avena
Pero no solo veganos e intolerantes a la lactosa toman y recomiendan la leche de avena. En cuestión de salud, esta bebida es una de las más recomendadas por los médicos de todo el mundo gracias a sus propiedades. Entre sus beneficios podemos destacar su capacidad para reducir el colesterol y para mejorar las digestiones.
Rica en aminoácidos: La leche de avena contiene ocho aminoácidos esenciales, garantizándonos ser una fuente de salud muy beneficiosa para nuestro organismo. En ocasiones no tomamos en cuenta el contenido de los alimentos en aminoácidos ya que son algunos de los nutrientes más desconocidos, pero son igual de importantes que las vitaminas o los minerales, los protagonistas absolutos siempre que se habla de información nutricional.
Rica en Vitamina B: El grupo de vitaminas B se relaciona habitualmente con dos conceptos que podrían parecer contrapuestos, pero que pueden convivir perfectamente. Estas vitaminas encontradas en la leche de avena nos aportan la energía necesaria para afrontar nuestra rutina diaria, motivo por el cual el desayuno es el mejor momento del día para tomarla, pero también nos ayuda a eliminar el estrés y calmar la ansiedad.
Rica en azúcares lentos: Otro de los beneficios de la leche de avena es que ayuda a estimular el páncreas y, por tanto, a regular los niveles de azúcar en sangre. Esta bebida está muy recomendada para diabéticos, pero también para quienes busquen adelgazar tomando alimentos naturales y sanos, la leche de avena es uno de los desayunos preferidos por los nutricionistas.
Rica en fibra: La leche de avena no solo nos ayudará a luchar contra el estreñimiento, también a disfrutar de mejores digestiones gracias a su alto contenido en fibra y a ser una bebida ligera y sana.
Rica en ácidos grasos omega 3: La importancia de los ácidos grasos omega 3 en nuestra alimentación es realmente importante, especialmente para personas con altos niveles de colesterol, su presencia ayudará a reducirlo y mantenerlo por debajo de niveles peligrosos para la salud.
La avena es un excelente alimento con propiedades realmente asombrosas. Te invitamos a conocer todos sus valores nutricionales en el artículo que ya le dedicamos a ella en exclusiva, para que te convenzas de la importancia de incluirla en tu dieta.
