En la actualidad las plantas medicinales están siendo usadas con mayor frecuencia que en tiempos pasados. La mayoría de estas plantas, aportan muchos componentes que las medicinas incorporan hoy en día. Como por ejemplo, la planta aloe vera. La cual es un tallo corto, cubierto y acanalado por algunas espinas que lo protegen a sus lados.
Esta planta en su mayoría no crece a más de 50 centímetros de altura. La misma puede crecer y tolerar elevadas temperaturas, así como vivir durante muchos días sin una sola gota de agua. Esta planta medicinal canalícela, es de color verde sin manchas. Y en su centro, crece un tronco con una flor de tono amarillo que le da aspecto estéticamente agradable.
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Donde encontrar la planta de aloe vera
La planta aloe vera se puede encontrar en cualquier parte del mundo. Sus cápsulas o semillas, son fáciles de sembrar en cualquier terreno donde pueda crecer libre y sin obstáculos. En donde reciba la luz del sol continuamente, para que pueda respirar.
Originalmente, esta exótica planta medicinal la podíamos encontrar en el viejo Oriente y parte de África. Hoy en día, sus beneficios son aprovechados en muchas partes del mundo sobre todo en los países de climas tropicales. Cuyas temperaturas, favorecen el perfecto crecimiento y desarrollo de sus nutrientes internos.
Su sabor es amargo aún más que la sal y el limón. Su aspecto interno es de moco elástico de color verde y transparente. Y por último, su pulpa es muy fácil de cortar. Pero su piel, si es algo dura. Sin embargo, esto es para protegerla de los climas áridos de donde proviene.
Historia de la planta aloe vera
En la actualidad, esta planta se encuentra esparcida por todos los continentes alrededor del mundo. Se dice que antiguamente era usada por los reyes y faraones para curarse las heridas luego de las batallas. Cabe destacar, que a pesar de que es originaria del continente africano sus propiedades comenzaron a ser descubiertas en el Oriente medio y parte de Asia.
Hasta ahora, los científicos han descubierto más de 300 tipos de plantas similares. Las podemos encontrar de diversos tamaños, desde los 20 centímetros hasta unos enormes árboles de 10 metros de alto. Con troncos extremadamente gruesos, que aportan mucha pulpa con excelentes propiedades.
Esta planta medicinal se incluye dentro de la familia de las liliáceas, entre las que también podemos encontrar el ajo, el tulipán y el lirio. Todas las especies de aloe vera son similares en cuanto a la bulbosa y su hoja en forma de espada, casi todas originarias del África Central. Los antiguos médicos ancestrales del África la denominaron como la “planta milagrosa” al poseer más de 200 propiedades que mejoran diversas enfermedades en el ser humano.
Otro de los orígenes que se le atribuye a esta planta es el bíblico. Ya que, según cerca del siglo XV AC se dice que un profeta clamo al cielo por Israel. Y usando esta planta, pudo eliminar muchas enfermedades.
Beneficios del aloe vera en la salud
A principios de 2014, la universidad de Cambridge publicó que la planta aloe vera era capaz de proteger a otras plantas. Como por ejemplo, el ají y el tomate de los rayos ultra violeta del sol. Y que además, impedía el crecimiento de bacterias en la capa externa de las mismas. Esto garantiza, que la pulpa babosa de esta planta es capaz de mantener fresco a otros frutos.
Muchos se preguntaran, como una planta con características tan extrañas es usada en todo el mundo. Las ventajas medicinales, cosméticas y regenerativas que esta planta posee son insustituibles en el mundo de la salud. Otra de sus propiedades de alta relevancia, es la cantidad de estimulantes para la reconstrucción de la piel.
Como por ejemplo, cuando se usa para quemadas en el ser humano. Las enzimas que esta planta incorpora demuestran que aporta nutrientes para la reconstrucción de la piel de forma rápida. Además contiene vitamina B12, proteínas y aminoácidos que son usados para reconstruir la flora intestinal, cuando se trata de problemas estomacales.
Esta planta está compuesta por manganeso, calcio, sodio, aluminio, hierro, cobre, cromo y fósforo. Los cuáles junto a otros minerales, promueven una reacción química estable que garantizan a nuestro cuerpo una perfecta absorción de los nutrientes que necesitamos a diario.
Cómo cultivar el aloe vera en casa
Esta planta es muy sencilla mantener en casa, ya que crece en cualquier ambiente donde se coloque. La temperatura normal para sembrar esta planta medicinal, es superior a los 10 grados centígrados. Debe ser en un terreno algo seco. La podemos colocar directamente al sol o en semisombra. En los hogares se pueden tener en espacio abierto, como en macetas de barro o plástico que puedan servir de protección a la misma.
Para tener esta planta medicinal en casa, no es necesario cavar un hoyo tan profundo. Ya que como es de un tamaño algo pequeño, su raíz no es tan profunda, y no debe sostener un tronco tan pesado. Lo más recomendable, es que sea regada una vez por semana, debido a que no tolera los suelos con mucha humedad porque su raíz es muy corta y puede caerse. Las semillas o cápsulas para sembrar las, podemos encontrar en la flor o sino en un tallo que contenga un poco de raíz. Luego, debemos sembrarla en otro lugar. De preferencia un espacio abierto, para que pueda volver a retoñar.
En resumen, la planta aloe vera es una planta que podemos sembrar casi en cualquier lugar. Pero lo más importante de esta planta, son sus múltiples beneficios en la medicina y estética, permitiendo así combatir infecciones, combatir problemas en la piel e incluso eliminar algunos hongos que pueden afectarnos en cualquier momento. Por lo que tener esta planta en casa viene siendo realmente indispensable, además de que adorna muy bien nuestro jardín.
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