Las dietas son de los temas que siempre están en el día a día de los hombres y mujeres que desean conservar su peso ideal y más aun para aquellos que sufren de obesidad o sobrepeso. Algunas se ponen de moda apoyadas casi siempre por una excelente publicidad y personalidades que las defienden, otras pierden credibilidad y hoy entra al debate: la dieta de la zona.
Algunos antecedentes de la dieta de la zona
La dieta de la zona apareció públicamente en 1995, en los Estados Unidos desarrollada por Barry Sears un médico y bioquímico de ese país. Inicialmente la dieta surgió como alternativas para la obesidad, las cardiopatías y la diabetes.
Posteriormente al ser adoptada como método para mantenerse en el peso ideal por algunas celebridades se ha hecho famosa como una dieta para bajar de peso. En ella se establece como filosofía que “la zona”, es el estado para estar saludable e implica estar en el peso ideal.
Antes de entrar al análisis de la dieta de la zona recordemos cuales son los fundamentos de una dieta equilibrada y saludable.
Dieta equilibrada y saludable
Los principales macronutrientes que aportan los alimentos son los hidratos de carbono, las proteínas y las grasas. Los organismos internacionales y regionales vinculados con la nutrición y la alimentación coinciden en afirmar que cada persona requiere que los alimentos que ingiera la persona cubran las necesidades calóricas acorde con su peso, edad, sexo y tipo de actividad física que desempeña.
Para una persona que tenga una actividad física moderada se estiman para las mujeres entre 1,600 a 2,400 y para los hombres 2,000 a 3,000 calorías por día. Para bajar de peso siempre se deben consumir menos calorías que las que se gastan y así evitar que se acumulen en forma de grasas.
Por otra parte se enfatiza en que la persona debe cubrir estos requerimientos calóricos basados en una alimentación balanceada y que la proporción de los nutrientes fundamentales debe corresponderse con las siguientes proporciones:
Hidratos de Carbono ——–50-60%
Proteínas ———————–12-18%
Grasas —————————25-35%
Además de las proporciones hay que tener en cuenta la calidad de los alimentos porque se puede tener una dieta equilibrada y la misma no ser saludable.
Los patrones de una dieta saludable de acuerdo a las indicaciones de las Guías para Alimentación de los Estados Unidos del 2015 son:
- Consumo elevado de frutas y vegetales
- Consumir granos enteros
- Productos y derivados lácteos con baja o ninguna grasa
- Productos del mar
- Leguminosas
- Nueces
- Baja en carnes rojas y procesadas
- Reducir el consumo de los alimentos azucarados
- Consumo moderado de alcohol
- Disminuir el consumo de sal
Fundamentos de la dieta de la zona
La hipótesis sobre la que se basa la dieta de la zona es que el origen de varias enfermedades, la obesidad y el envejecimiento se sustentan en una inflamación crónica que se va produciendo en los tejidos por las reacciones que se producen en el organismo como respuesta a una alimentación inadecuada que a su vez crea un desbalance hormonal.
Las teorías del Dr. Sears señalan que una alimentación inadecuada conduce a la formación de grasa tóxica, estrechamente asociada con la inflamación, la obesidad y diversos problemas de salud.
Los postulados de la dieta de la zona establecen un consumo calórico bajo de 1100 calorías. En cuanto a la proporción de los macronutrientes recomienda que se deberá corresponder con la siguiente distribución:
Hidratos de Carbono ——–40%
Proteínas ———————–30%
Grasas ————————–30%
Un aspecto muy favorable de esta dieta es que recomienda el consumo de alimentos con bajo índice glucémico, tema al cual hemos hecho referencia en Alimentos Ricos y que es de extraordinario valor para mantener los niveles de glucosa y de insulina en sangre sin picos muy elevados.
Comparación entre una dieta equilibrada y la dieta de la zona
Si analizamos de forma comparativa los valores antes señalados podemos arribar a las siguientes conclusiones:
- La dieta de la zona es hipocalórica
- Defiende un elevado consumo de proteínas, por lo que la podemos considerar hiperproteica
A los aspectos anteriores se adiciona la distribución de los alimentos en 5 comidas al día, tres de ellas de mayor volumen. En esto no existen grandes diferencias ya que esto se ajusta a los criterios más actuales de una alimentación saludable.
Otro de los principios de la dieta de la zona, es el elevado consumo de ácidos grasos Omega 3. Aunque es reconocida la importancia de los mismos, en la dieta de la zona es muy elevado.
La dieta se compone de tres fases y en todas ellas se aconseja consumir los complementos alimenticios y saciantes que te venden y es precisamente este uno de los aspectos más cuestionados, porque son comercializados por la firma asociada a sus promotores que obligan a adquirirlos de forma sistemática, lo que la hace más cara que otros planes de alimentación.
Tanto en la dieta de la zona como en cualquier otro sistema de alimentación la práctica de algún deporte y la actividad física sistemática son muy importantes.
¿Cuáles son los beneficios que postula la dieta de la zona?
Los creadores y promotores de la dieta de zona postulan que aplicando el esquema descrito por ellos y previamente expuesto se logran grandes beneficios, destacando entre ellos:
- Estabilizar los niveles de azúcar en la sangre
- Lograr un mejor balance hormonal manteniendo a la insulina en sus niveles óptimos
- Aumentar la capacidad antioxidante y con ello reducir la aparición de radicales libres
- De esta forma se evita la inflamación silenciosa que va afectando los tejidos y contribuye a atenuar el proceso del envejecimiento
- Atenuar los síntomas de diversas enfermedades como la hipertensión, diabetes y cáncer, entre otros
- Alcanzar la máxima salud y vitalidad, y beneficiarte de forma integral
- Mejorar el aspecto de la piel y fortalece cabello y uñas
- Optimiza el funcionamiento del sistema inmunológico.
- Permite una mayor concentración mental, promueve el bienestar y la persona es más productiva
Comer mejor para estar saludables
La dieta de la zona es muy promocionada internacionalmente, y hay numerosas anécdotas y casos que refieren resultados muy favorables. Y aunque se afirma que hay resultados científicos que avalan el uso de la misma esto es objeto de controversia.
Las evidencias científicas y el respaldo técnico a los conceptos que sustentan la dieta de la zona no son compartidos totalmente por los expertos en el tema y son objeto de debate, a ello se une la alta dependencia de la compra de sus productos específicos y no centrarse en la mejor forma de comer para estar saludable.
En Alimentos Ricos se han abordado en diversas ocasiones dietas basadas en un solo producto, en nombres de personas, o en métodos para bajar de peso en horas, de forma express y otras numerosas variantes, siempre tratando de ofrecerte la máxima información sobre todas las opciones disponibles.
Pero después de conocerlas, es necesario que de conjunto con tu médico o nutricionista evalúen si alguna es conveniente para tu caso en particular, cada persona es única y lo que funciona bien para una no tiene por qué serlo para otra.
Y todo plan para bajar de peso requiere de un diseño individual, de conocer el estado de salud de cada persona, de ajustar sus requerimientos calóricos a su nivel de actividad física y de tener un plan de seguimiento y control de la pérdida de peso para que se produzca de forma continua y sin rebotes.
Ahora te toca tomar a ti la decisión y sacar tus propias conclusiones… Nosotros te seguimos aconsejando: come mejor para estar saludable.
