La tensión arterial baja en general es buena, pero a veces los síntomas de tensión baja indican que la presión arterial empieza a caer por debajo de los valores aceptables.  Todos padeceremos en algún momento hipotensión arterial.  En esta nota te explicaremos cuáles son los síntomas de tensión baja y qué hacer en cada caso.

Descubre cómo: Bajar la tensión 

Qué es y cuáles son los síntomas de tensión baja

La tensión o presión arterial es la fuerza con que el corazón empuja la sangre contra las arterias.    Estos valores se expresan en mmHg (milímetros de mercurio).

Hay dos medidas de la presión arterial: cuando el corazón se contrae, la fuerza se llama presión sistólica; cuando el corazón está en reposo hablamos de presión diastólica.  Durante el período de sístole, la sangre es impulsada por las arterias hacia los distintos órganos.  Durante el periódo de diástole, la sangre es enviada al corazón llenando las arterias coronarias.

La presión arterial se expresa así con dos números: el superior es la presión sistólica y el inferior es la presión diastólica.

En las personas adultas, la presión arterial normal como bien lo explica la NIH tiene valores que están normalmente por debajo de 120 mmHg  para la presión sistólica y por debajo de 80 para la presión diastólica y se expresa como 120/80.  Sin embargo, una presión arterial baja se define como de 90/60 o inferior.

La tensión arterial baja puede deberse a múltiples causas, aunque todos en algún momento padeceremos de hipotensión arterial.

La mayoría de las veces la tensión arterial baja no causa ningún síntoma notable.  Algunas condiciones de salud pueden provocar tensión arterial baja, y también la ingesta de algunos medicamentos, diuréticos y antidepresivos.

Pero muchas personas y especialmente mujeres tienen presión arterial baja por razones desconocidas o no relacionadas con enfermedades ni medicamentos:

• Hipotensión ortostática: ocurre cuando se pasa de estar sentado o acostado a ponerse de pie.  Al cambiar de posición ocurre en breve mareo y puede retrasarse hasta cinco minutos después de levantarse.  Hay varias causas para la hipotensión ortostática como embarazo, deshidratación, larga estadía en la cama, diabetes, problemas cardíacos, exceso de calor, várices o algunos trastornos neurológicos.  Algunos medicamentos también pueden producir baja tensión ortostática.  Es muy frecuente en adultos mayores.
• Hipotensión postprandial: se produce después de comer, ya que el organismo destina más sangre al aparato digestivo, aumentando la frecuencia cardíaca y contrayendo determinados vasos para mantener la presión arterial en sus valores normales.  Cuando este mecanismo falla se produce la hipotensión post prandial.  Afecta principalmente a los adultos mayores.
• Hipotensión mediada neuralmente: causada por emociones, estrés o por permanecer durante de pie durante mucho tiempo.  En este último caso afecta especialmente a mujeres, adultos jóvenes y niños.   Se cree que se debe a una mala comunicación entre el cerebro y el corazón.

Los síntomas de tensión baja son:

• Fatiga.
• Aturdimiento.
• Mareos, náuseas.
• Piel fría y húmeda.
• Respiración rápida o superficial.
• Falta de concentración.
• Visión borrosa.
• Finalmente pérdida del conocimiento.

La intensidad de los síntomas puede variar con cada persona: algunas sólo sienten una leve incomodidad mientras que otras se sienten realmente mal.

Qué hacer ante los síntomas de tensión baja

Probablemente si padeces desde hace tiempo o en forma periódica hipotensión arterial, y se han descartado causas médicas, ya has aprendido a conocer tus síntomas y cuentas con tus propias estrategias para sobrellevar el momento y esperar a que la presión arterial se estabilice.

Por otra parte las personas que habitualmente padecen de tensión arterial baja deben saber cuáles son las circunstancias que provocan bajas de tensión en su organismo para evitarlas o prevenir una baja de tensión arterial.

Chequea esta lista:

• Mantenerse hidratada.
• Limita la ingesta de alcohol.
• Reduce tus niveles de estrés para prevenir la hipotensión emocional.
• Procura no estar de pie demasiado tiempo, toma tus descansos para sentarte.
• Utiliza medias de compresión para ayudar a la circulación sanguínea en las piernas.
• Procura no caminar cuando hace demasiado calor.
• Realiza movimientos lentos y graduales para levantarte de la cama o la silla.
• No te sientes con las piernas cruzadas (evita la hipotensión ortostática).
• Si sientes que los síntomas de tensión baja se agravan, procura sentarte para evitar una caída en el caso de perder el conocimiento.
• Si sientes que aparecen los síntomas de tensión baja como sed, sequedad en la boca, visión borrosa, náuseas o aturdimiento, procura sentarte y pedir ayuda.
• Realiza ejercicios isométricos antes de levantarte para ayudar a elevar la presión arterial, como apretar una pelota de goma o una toalla con la mano.
• Duerme con la cabeza ligeramente elevada.
• Evita los alimentos ricos en carbohidratos.
• Agrega sal a las comidas para evitar la deshidratación.
• No saltees el desayuno
• Incluye en tu dieta alimentos que ayudan a mantener estabilizada la presión.
• Para prevenir los síntomas de tensión baja post prandial, comer porciones pequeñas de alimentos bajos en hidratos de carbono.

Más allá de estas estrategias, si los síntomas de tensión baja persisten, es necesario consultar con un médico para descubrir las causas subyacentes.

Tu médico podrá indicar diversas pruebas para realizar el diagnóstico.

En muchos casos sencillamente basta con algunos cambios en el estilo de vida para regularizar la presión arterial, pero en otros son necesarios los medicamentos y el tratamiento de la afección subyacente.

Esto te interesará: Presión arterial alta