El Blue Monday es una de esas cosas que nos pueden parecer anecdóticas, incluso algo absurdas, pero que incomprensiblemente tienen una fórmula matemática tras ellas. El día más triste del año coincide con el tercer lunes de Enero y es inevitable acordarnos de él cada vez que llega la fecha: los medios de comunicación se empecinan en recordarnos que tal día como hoy no debemos sentirnos culpables si la tristeza invade nuestras horas.
¿Qué es exactamente el Blue Monday? ¿En qué variables se asienta esta afirmación? ¿Quién ha sido su precursor? En el artículo de hoy vamos a dar respuesta a estas preguntas, pero también vamos a ayudarte a superar el Blue Monday y desmontar teorías. Solo tú puedes conseguir sonreír y ser feliz en el día más triste del año. Descubre lo bello que es ir desentonando con el resto del mundo.
¿Qué es el Blue Monday?
El Blue Monday se define a sí mismo como el Día Más Triste del Año o simplemente como el Lunes Triste. No se puede hablar de un día exacto, ya que al tratarse del tercer lunes del mes de enero, debemos acudir al calendario para ver cuando cae cada año. Por ejemplo, en 2016 es el 18 de Enero, mientras que en 2017 cae el 16 de Enero.
Esta teoría está basada en un estudio de Cliff Arnal, un investigador británico de la Universidad de Cardiff para la cual utilizó variables como:
- La vuelta a la rutina después de la Navidad
- La falta de vacaciones
- Estrés
- El abandono de los propósitos navideños
- Falta de motivación
- Replanteamiento sobre aquello que no deseamos en nuestra vida y que sigue estando presente en el nuevo año
- La cuesta de enero a nivel motivacional y económico
Lo curioso es que este Blue Monday fue utilizado por primera vez en 2005 como parte de una campaña publicitaria de una agencia de viajes (Sky Travel), que quería de este modo analizar las tendencias vacacionales y las fechas de reserva. La campaña fue tan exitosa que desde entonces, todos «celebramos» el Blue Monday y ya ha quedado marcado en el calendario.
5 Consejos para superar el Blue Monday
Al mal tiempo, buena cara:
Enero suele ser en general el mes más frío del año, un factor que inevitablemente influye en el estado anímico. Cielos grises, lluvias y bajas temperaturas no animan, pero tú puedes conseguir transformarlo en algo positivo. Busca las ventajas del frío: disfruta de una tarde de manta y sofá, sal a pasear bien abrigado y degusta con la vista los bellos paisajes invernales o planea actividades propias de esta época, como ir a la nieve.
Haz más vida social:
Que haga mal tiempo no significa que debas pasar el invierno como un ermitaño. Rompe esquemas y plantea una quedada en tu grupo de amigos, aunque sea lunes. Busca un horario en el que todos hayáis acabado con vuestras obligaciones laborales y organiza una cena improvisada en casa, una salida al cine o simplemente una hora en vuestra cafetería preferida. La calefacción de estos lugares y relacionarte con otras personas te ayudarán a mejorar tu estado anímico.
Planea tus vacaciones:
Ahora que ha pasado todo el jaleo de la Navidad, ¿no crees que es el mejor momento para comenzar a planificar tus vacaciones? Ve decidiendo fechas, coge un mapa y piensa en aquellos lugares que te gustaría visitar. Mira presupuesto aproximados por Internet para ir cerrando el círculo y comienza a soñar con tus próximas vacaciones. Te ayudará a mantener la mente ocupado y a tener ilusión por algo nuevo.
Practica el mindfulness:
El mindfulness es una nueva filosofía de la que ya te hemos hablado y que te ayuda a nivel de cuerpo y mente en esos momentos de bajón. El Blue Monday puede ser la excusa perfecta para iniciarte en este mundo.
¡Di SÍ al chocolate!
¿Hay algo mejor para la tristeza que una buena dosis de chocolate? Está comprobado que mejora el estado de ánimo y aumenta la felicidad. Eso sí, a ser posible acude al chocolate negro, que además es realmente beneficioso para la salud y aporta menos calorías que el chocolate con leche o el chocolate blanco. Tu alimentación también te puede subir el ánimo.