¿Estás embarazada? Tanto si es la primera vez como si ya tienes experiencia en estas lides, hay un tema que todas las mujeres embarazadas tienen claro: lo importante que es la alimentación durante la gestación. En esta etapa, el bebé se alimentará de lo que tú comas, a través del cordón umbilical, por lo que es muy importante que tú también cuides mucho tu menú. Es una época de antojos, lo sabemos, pero no te descuides y combina ese antojo de dulce que te da a media tarde con una comida o una cena rica en alimentos sanos para tu bebé.

En esta línea, te recomendamos hoy 5 alimentos que no deberían faltar en tu dieta durante los meses de embarazo. ¡Toma nota!

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Los 5 alimentos imprescindibles en el embarazo

Aguacate:

¿A quién no le gusta un buen aguacate? Este fruto es muy rico en ácido fólico y vitamina B9, ambos nutrientes imprescindibles para el desarrollo del bebé. Influyen en su cerebro y en el sistema nervioso.

Zanahoria:

Por otro lado, para la formación del bebé también necesitarás alimentos ricos en Vitamina A, otro imprescindible, en este caso, para los ojos, dientes y huesos. Además, recuerda que la zanahoria la puedes comer de mil maneras (cruda, rallada, cocida, frita…) por lo que seguro que encuentras la forma de tomarla a diario.

Espinacas:

A Popeye, las espinacas le daban fuerza; a tu bebé, también. Son muy ricas en ácido fólico e hierro, dos elementos que ayudarán a la formación de las células de tu bebé. Cuenta con ellas en tu menú habitual y saldrás ganando.

Nueces:

Los frutos secos, en general, son muy buenos para tu alimentación y salud, tanto para ti como para tu bebé. Las puedes comer en cualquier momento y os aportarán un plus de energía a los dos: en ensaladas, en salsa o simplemente a puñaditos. ¡Y además están riquísimas! Cómelas sin miedo y verás como descubres lo fácil que es comer bien, sano y rico.

Avena:

Por último, la avena, en cualquiera de sus formas y variedades, te vendrá genial durante el embarazo, ya que es uno de los alimentos más ricos en vitamina B y fibra. Puedes tomarla en copos, en bebida, mezclada con yogur, convertida en leche o galletas, etc. Hay muchas formas, seguro que encuentras la que más te gusta.

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