Dicen que el embarazo son los nueve meses más bonitos en la vida de la mujer y, aunque a tu alrededor todo es alegría, todo es buenas energías y felicidad, es posible que tú estés experimentando algo muy diferente. No, nada es perfecto, especialmente para quien lo vive en primera persona y es normal que aparezcan miedos y dudas. Siempre. En todos los aspectos de tu vida, van a estar ahí. Pero lo que tienes que conseguir es que esto no enturbie tu vida y tu experiencia, porque sí, el embarazo puede ser precioso si sabes disfrutarlo.

Por ello, hoy hablamos precisamente de esto. Uno de los miedos y dudas más grandes durante el embarazo y que a algunas personas les puede suceder. Da igual si eres primeriza o si ya tienes a tus espaldas alguna que otra experiencia como gestante. Lo cierto es que cada embarazo es un mundo y en el segundo o incluso en los siguientes, te pueden surgir dudas que no aparecieron en el primero. Por ejemplo, ¿es normal tener dolores de menstruación y sangrado durante el embarazo? ¿Debe ser siempre motivo de alerta o por el contrario es más común de lo que pensamos? Hoy intentaremos ayudarte con este tema. Respira, siéntate y sigue leyendo.

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Los dolores de menstruación, uno de los primeros síntomas de embarazo

Muchas mujeres se llevan una sorpresa al saber que están embarazadas, porque creían justo lo contrario. Muchas de nosotras, antes de cada menstruación, tenemos algún que otro dolor que nos indica que la regla está a punto de hacer su visita mensual. Pero cuando los días siguen pasando, el dolor o molestia no desaparece y el calendario nos indica que ya llevamos algunos días de retraso, es el momento de empezar a desconfiar. Y si…

Sí, los dolores de menstruación durante el embarazo son bastante habituales, especialmente cuando el embrión está recién implantando. De hecho, las molestias y sensaciones del primer mes pueden ser idénticas a las de una menstruación. En cuanto al sangrado durante el embarazo, también en este primer mes puede ocurrir y no es motivo de alarma (al menos, no siempre). Es lo que se conoce comúnmente como sangrado de implantación y aunque se caracteriza por ser muy leve y breve, en algunos casos si dura un poquito más y coincide con que las menstruaciones de esa mujer son escasas, es posible que sea confundido con una menstruación y la fecha de gestación que nos dé el doctor cuando nos enteremos (más adelante) sea diferente a la que nosotras calculamos.

En resumen, en las primeras semanas de embarazo (especialmente en esos días en los que aún no sabemos si estamos en estado o no) es normal tener dolor de ovarios, de riñones, cólicos y algún pequeño sangrado.

Pero si siguen pasando los días y los síntomas no remiten, ya sí puede ser causa de algo más.

¿Qué pasa si los dolores continúan o van en aumento?

Lo normal es que estos síntomas desaparezcan en la 4-5-6 semana. Si no lo hacen, si son muy constantes y lo peor, si van en aumento, es interesante detectar si hay alguna otra causa (que no siempre tiene que ser mala) que los esté ocasionando.

Por supuesto, siempre te vamos a recomendar que acudas al médico cuando notes algo que te preocupe, pero especialmente si ya no es «normal». Aunque sea solo por quedarte tranquila, valdrá la pena la visita.

¿Se puede estar embarazada y tener la regla?

Como decimos, el sangrado de implantación es bastante común. Este mínimo sangrado durante los primeros días no nos debería preocupar. Médicamente, no es posible tener la regla estando embarazadas. Sin embargo, todos conocemos o hemos escuchado el caso de alguna mujer que no se ha enterado de su embarazo hasta la recta final precisamente porque la menstruación no ha desaparecido.

Evidentemente, son casos muy aislados, por lo que ante el mínimo sangrado debes acudir al doctor sin excusas y sin posponerlo. Como te decimos siempre, no tiene que significar ningún mal grave, pero siempre es mejor prevenir que curar.

¿Cómo distinguir el sangrado de implantación con la regla?

El sangrado de implantación se caracteriza sobre todo porque su cantidad. Es mucho más leve que la regla normal, por lo que es fácil detectarlo si tenemos una menstruación normal. También tiene una textura más ligera e incluso el color nos puede dar pistas: normalmente, tiende a marrón, mientras que la regla normal tiene en los días más intensos un tono rojo más vivo.

Por tanto, es fácil distinguirlo si este sangrado de implantación es «normal»: escaso, ligero y marrón. Pero como decimos, hay mujeres que, por las características normales de su regla y por la variación en este sangrado durante el embarazo, lo confunden.

También es cierto que no todas las mujeres tienen este sangrado de implantación, por lo que si no aparece, no te debes preocupar para nada.

¿Qué puede significar el sangrado durante el embarazo?

Si el sangrado se da más allá de los primeros días, evidentemente no será una buena señal. Puede significar un problema en la madre o en el feto. Si el sangrado es abundante, hay riesgo de aborto, por lo que nunca debemos dejar que vaya a más. A la primera gota, hay que consultar siempre con nuestro médico para que nos garantice que todo está bien.

El sangrado durante el embarazo puede significar quistes, implantación inadecuada, placenta baja, entre otras cosas. Por lo tanto, es muy importante que no te autodiagnostiques, que no hagas esfuerzos y que no dejes pasar más tiempo. No esperes y consulta con el médico para que evalúe tu situación y te deje más tranquila. Y sobre todo, si te indica que debes guardar reposo, ¡hazle caso!

Recuerda que tu matrona será tu mejor aliada

Para cualquier duda, pregunta o si tienes cualquier síntoma que no te deja tranquila, pregúntale a tu matrona. Ella será tu mejor amiga durante estos 9 meses e incluso, después te puede seguir ayudando con consejos muy prácticos sobre cómo cuidar a tu bebé de la mejor manera.

En resumen, desde nuestro humilde blog solo queremos que sepas que, en los primeros días de gestación, es normal tener dolores menstruales o sangrado durante el embarazo, ya que ambos (siempre que no sean muy intensos) son de los síntomas más habituales de la gestación. Pero si continúa, si se prolonga demasiado, no debes olvidar que un doctor será el único que pueda evaluar realmente si se trata de un asunto serio y si hay que poner algún tipo de tratamiento para que todo se desarrolle de la mejor manera posible.

Disfruta de estos maravillosos nueve meses que tienes por delante y deja en mano de los profesionales todas las dudas que tengas para que todo marche bien.

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