En torno a la cerveza existen muchos mitos. Pero lo cierto es que, con control, es una bebida muy sana a pesar de tener cierta graduación alcohólica. Hoy queremos desbancar uno de los mitos más populares que giran en torno a la cerveza. No, la cerveza no engorda, ni nos hace subir de peso, ni nos crea esa «barriga cervecera» de la que desde tiempos ancestrales han intentado culpar.
Todo lo contrario, la cerveza es muy rica en nutrientes. ¿Quieres conocer más sobre esta bebida que seguro que te encanta? ¡Sigue leyendo!
Ampliamos info: Todo lo que debes saber sobre la cerveza y la salud
¿Por qué la cerveza no engorda?
Se suele relacionar el consumo de cerveza con el aumento de peso o de la circunferencia de la barriga porque, normalmente, suele el género masculino de mediana edad quien la consume con mayor frecuencia. Y, aunque sea caer en estereotipos, es cierto que a esta edad nos cuesta más adelgazar, además de llevar un ritmo de vida más sedentario. En cualquier caso, la cerveza no es la culpable de que nuestra barriga haya aumentado con el paso del tiempo, o al menos no es la única.
La cerveza no engorda y un consumo regular con control no debería ser suficiente para que nos haga coger peso por sí sola. De hecho, nos aporta muchos beneficios para nuestra salud, ya que se trata de una bebida que surge con la combinación de la fermentación de la levadura del mosto + malta de cebada + aromatización del lúpulo. De sabor amargo, el tono de la cerveza dependerá del color del grano tostado de la malta.
Pero si hablamos de un aspecto nutricional puro, encontramos en ella nutrientes como vitaminas del grupo B, minerales (potasio, calcio, sodio y magnesio) y polifenoles. Estos antioxidantes previenen el envejecimiento celular.
Por todo ello, la cerveza no engorda y además es una bebida muy sana. De hecho, contiene muy pocas calorías: un vaso de 200 ml., contiene 90 calorías con alcohol o tan solo 30 si elegimos sin. ¡Pero cuidado! No abuses de ella… A no ser que recurramos a fórmulas 0.0, la cerveza habitualmente contiene alcohol y excedernos en su toma sí puede afectar a nuestra salud. Además de, claro está, solo debe ser consumida por adultos que no tengan problemas de salud.
Evidentemente, si tienes algún problema de salud, debes evitar el consumo de alcohol en cualquiera de sus variedades. Concretamente, la cerveza no está aconsejada en casos de diabetes, problemas de hígado, alcoholismo, si estás en tratamiento con medicamentos (por posible interacción) y evidentemente tampoco si estás embarazada, en período de lactancia o si eres menor.
En cualquier caso, si has llegado hasta aquí preguntándote si la cerveza no engorda, ya te decimos que estás en lo cierto y puedes consumirla sin miedo a que tu cuerpo sufra los cambios.
¡A brindar!