La bronquitis crónica así como el enfisema son dos enfermedades de los pulmones, que muchas veces ocurren juntas, que pertenecen a un grupo de enfermedades pulmonares llamadas Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC por sus siglas en español). Ellas dos son las más frecuentes. En la EPOC también está incluida el asma y otros problemas pulmonares.
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A través de los pulmones las personas toman el oxígeno del aire que necesitan para vivir. En ellos, el oxígeno pasa a la sangre, y a través de ella a los tejidos. Los tejidos le pasan a la sangre el dióxido de carbono sobrante de la producción de energía en ellos, y esta lo lleva a los pulmones que lo sacan al exterior.
La mayoría de las personas mayores que tienen EPOC tienen bronquitis crónica y enfisema al mismo tiempo.
Los pulmones tienen dos partes: las vías aéreas formada por los bronquios de diferentes calibres y tamaños y los alveolos que son cavidades microscópicas muy parecidas a un panal de abejas. Cuando los bronquios se inflaman y se llenan de secreciones por años, estamos en presencia de bronquitis crónica. Cuando las paredes de los alveolos se rompen, estamos en presencia de enfisema. Aunque son enfermedades distintas, dan síntomas parecidos y se tratarán de forma simultánea en este artículo.
¿Cuáles son los síntomas de la bronquitis crónica y el enfisema?
Al inicio, los síntomas son muy ligeros. Cuando va avanzando la enfermedad, los síntomas que aparecen son:
- Tos, acompañada casi siempre de mucosidades o flemas, de color blanquecino.
- Falta de aire.
La tos y la falta de aire son los síntomas principales.
- Debilidad y agotamiento, aún ante actividades ligeras.
- Puede haber insomnio por la tos o la falta de aire.
Cuando avanza más:
- Falta de aire importante para realizar cualquier actividad por ligera que sea.
- La tos se vuelve muy persistente.
- Puede acumularse líquido en los pies y piernas (edema).
- Puede aparecer, por la falta de oxígeno, un color azulado – violáceo en los dedos de manos y pies.
- Pérdida de peso.
- Aumentan las infecciones respiratorias, en particular la gripe y neumonías.
¿Qué provoca la bronquitis crónica y el enfisema?
La bronquitis crónica y el enfisema se producen casi siempre por inhalar sustancias que dañan los pulmones. La principal causa de ellas es el humo del cigarro. Otras causas son la contaminación del ambiente, y el polvo.
Cualquiera de las sustancias descritas, van actuando durante años, y van lastimando los pulmones.
El humo de cigarro que se respira cuando otra persona está fumando, daña tanto como el hecho de fumar. También hay una creencia extendida que fumar cigarros (habanos) no daña. Eso no es cierto. Los estudios que identifican el humo del tabaco como causa de EPOC y de cáncer de pulmón, no hacen distinciones entre un tipo u otra forma de fumar.
Más del 80 por ciento de los casos de bronquitis crónica y de enfisema son causados por el hábito de fumar. Las personas que fuman y están o han estado expuestas a otras sustancias dañinas para los pulmones, tienen más riesgo de padecerlas.
¿Cómo saber si se padece de bronquitis crónica o enfisema?
Si se presentan algunos de los síntomas descritos arriba, se debe consultar al médico. Este hará un grupo de preguntas, y algunas pruebas, como una radiografía de los pulmones, un electrocardiograma, algunos análisis de sangre, una ecografía del corazón y la más importante de todas, una espirometría.
Esta prueba permite saber cómo están funcionando sus pulmones, y la capacidad que tiene en los mismos. Habitualmente con estas pruebas es suficiente para hacer el diagnóstico.
¿Cómo puedo prevenir la bronquitis crónica o enfisema?
Lo principal que se debe hacer para no padecer de EPOC es no fumar o dejar de hacerlo.
Dado que la principal causa de estas enfermedades es el hábito de fumar, parece lógico que si no se fuma, la probabilidad de padecer la enfermedad en el futuro disminuye notablemente.
Las personas que fuman, y aún no padecen la enfermedad o es muy incipiente, si logra dejar el hábito, logran detener la bronquitis y el enfisema, lo que da lugar a que en ocasiones se logra revertir la enfermedad y mejorar notablemente.
Si la persona fuma, puede ser difícil abandonar el hábito. Varias instituciones de salud tienen programas para ello. Dígales a su familia y a sus amigos que está intentando dejar el hábito, para que le apoyen.
En lo posible, evite las sustancias que irriten los pulmones. Trate de no estar cerca de personas que fuman cuando lo hagan, el humo que espiran esas personas también puede provocarle la enfermedad.
¿Qué se puede hacer para mejorar una bronquitis crónica o enfisema?
Se pueden hacer varias cosas que pueden detener la enfermedad si no está muy avanzada, y en cualquier caso la pueden mejorar. Los pilares del tratamiento son:
- Enlentecer o detener la enfermedad
- Alivio de los síntomas
- Prevenir las complicaciones
- Hacer que las personas con EPOC se sientan mejor en general.
Al igual que en la prevención, el factor más importante es dejar de fumar.
Hábito de fumar: Si la persona con bronquitis crónica o enfisema fuma, solo si deja de hacerlo podrá detener o enlentecer estas enfermedades. De lo contrario, los síntomas irán empeorando aceleradamente.
Otros hábitos de vida que ayudan a combatir la enfermedad:
- Eluda los lugares con mucha contaminación del aire o atmosférica.
- Instrúyase en técnicas para mejorar su respiración. Un fisioterapeuta puede ayudarle.
- Trate de no estar sobrepeso. Los pulmones tienen que trabajar más en las personas con demasiado peso.
- Permanezca activo hasta donde pueda. Consulte con su médico o un entrenador lo que puede o no hacer.
Las medicinas permiten mejorar los síntomas de la bronquitis crónica y el enfisema. Las medicinas que más a menudo se recetan son los broncodilatadores (permiten que las vías respiratorias se dilaten y mejoran así la respiración; los esteroides que disminuyen la inflamación de los bronquios. Ambos se pueden administrar en tabletas o por medio de inhaladores.
Los antibióticos se administran para mejorar las infecciones que se producen con frecuencia en estos pacientes.
El oxígeno se utiliza cuando la enfermedad ha avanzado más para mejorar el oxígeno en la sangre. Se puede utilizar en las casas de los pacientes. Se administra por medio de una máscara que cubre la nariz y la boca o por unos tubos finos que se presentan a la entrada de la nariz.
Muy rara vez está indicada la cirugía, cuando la enfermedad es muy grave y existe lo que se conoce como “bulas” en los pulmones. Esto ocurre con más frecuencia en el enfisema pulmonar.
Existen programas de rehabilitación pulmonar que mejoran el estado de las personas con estas enfermedades.
¿Qué vacunas se deben poner?
Toda persona con bronquitis crónica o enfisema debe estar vacunada contra la influenza (anualmente) y contra la neumonía (cada 10 años).
Tanto la gripe o influenza y la neumonía pueden ocasionar graves problemas a personas con bronquitis crónica o enfisema.
¿Qué es la rehabilitación pulmonar y cuando la necesitaría?
La rehabilitación pulmonar mejora el estado de las personas con la enfermedad, y comprende ejercicios respiratorios y entrenamiento psicológico. Se realiza con el objetivo de ayudar a las personas a realizar sus actividades diarias con el menos esfuerzo posible.
Pero todas contribuyen, en su conjunto, a curar, o al menos mejorar las manifestaciones de bronquitis.
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