Uno de los asuntos de belleza (¡y de salud!) que más nos preocupan es padecer un herpes labial. No solo por la cuestión antiestética e incómoda, en ocasiones, también pueden ser bastante dolorosos. Y además, la Ley de Murphy actúa y estos herpes aparecen la mayoría de las veces en los momentos más inoportunos: vacaciones, viajes, eventos especiales…
Este artículo te va a resultar muy útil: te hablaremos más sobre el herpes labial y te daremos una serie de recomendaciones y de trucos naturales para que desaparezca antes. Tiene sus días, es cierto, y no hay nada milagroso, pero si consigues librarte de él unos días antes mejor que mejor, ¿no?
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Algunas pinceladas sobre el herpes labial
A estas alturas, todos sabéis lo que es un herpes labial, pero por si acaso, te lo resumimos rápidamente para ponerte en antecedentes. El herpes labial se contagia a través del contacto con otra persona que tiene el brote, ya sea mediante la piel, la saliva o incluso el uso de cuchillas, toallas, etc.
Suele manifestarse como un brote rojo en los labios y sus síntomas son picor y ardor. Más que peligroso, es muy incómodo y molesto.
5 remedios naturales para el herpes labial
Por fortuna, el herpes labial es tan común como fácil de acabar con él. Como decimos tiene sus días, pero podemos acelerar el proceso gracias a ciertos trucos. Hemos seleccionado cinco para que elijas el que mejor te venga.
Recuerda que antes de hacer cualquiera de ellos, es importante que cuides bien la limpieza de la zona. Lava bien la herida con jabón antiséptico y agua.
Ajo:
El antibiótico natural por excelencia también nos ayuda contra el herpes labial. Es tan fácil como partir un ajo por la mitad y frotarlo sobre la herida tan solo unos segundos. Repite varias veces al día.
Leche:
La leche nos ayuda a calmar la sensación de ardor y a hacer que cure más rápido. Humedece un algodón con leche y frótalo sobre la herida.
Té negro:
De nuevo, un algodón bien empapado en té negro te ayudará a aliviar y curar la ampolla originada por el herpes.
Limón:
El limón es uno de los remedios caseros más utilizados no solo para el herpes labial, también para los granos, espinillas y otros problemas de la piel. Echa unas gotas de limón directamente sobre la ampolla varias veces al día.
Sal:
Por último, hemos elegido otro de los ingredientes que nunca faltan en la cocina para ayudarte con el herpes. Machaca bien un poco de sal hasta que quede una pasta más fina y, con un algodón, aplica sobre la zona varias veces al día.
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