Patatas fritas, gominolas, chocolates… Hoy día estamos rodeados de dulces y chucherías varias que nos tientan casi a cada momento con solo salir de casa. Son productos llenos de azúcares y grasas trans, unidos a potenciadores de sabor como el glutamato de monosodio, que no nos aportan nada bueno a nuestra dieta. Lo único «bueno» que nos dan son los escasos segundos de placer mientras los comemos, que ya se encargan de añadirle cosas para que tengan un sabor muy rico y sean muy adictivos, pero esos segundos quedan ensombrecidos cuando nos damos cuenta de la cantidad de calorías vacías y aditivos nocivos que acabamos de ingerir. Antes eso no pasaba, ya que hubo un tiempo en que cuando les apetecía un «capricho», lejos de consumir productos poco saludables, comían aceitunas, pepinillos, pipas, maíz, semillas de calabaza, altramuces… Alimentos llenos de nutrientes y beneficios. Hoy nos vamos a centrar en las propiedades de los altramuces.
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Propiedades de los altramuces
El altramuz es una leguminosa, al igual que los garbanzos, las lentejas o los cacahuetes. Tiene forma redonda y aplanada, de color amarillo y un sabor un tanto amargo. Es un producto que se consume como golosina o incluso como aperitivo, en las zonas que rodean al Mar Mediterráneo desde hace siglos y en la actualidad se consume mucho como sustituto de la soja, siendo su consumo muy recomendable para las personas que no consuman carne en su dieta, ya que al igual que la soja tiene un gran contenido en proteína vegetal como buena leguminosa que es.
Además de tener una gran cantidad de proteínas, éstas son de alta calidad, siendo su contenido en albúmina muy superior a la contenida en el huevo, que es un alimento considerado como patrón de proteínas albúminas, sin tener los efectos secundarios de la proteína animal como son: acumulación de gases, digestiones pesadas y acumulación de hormonas o toxinas animales. Sus proteínas de gran calidad ayudan a equilibrar los aminoácidos y los beneficios que se asocian a su consumo es que ayudan de manera muy efectiva a regular el colesterol, por lo que favorece la salud cardiovascular.
Otra de las propiedades de los altramuces es que posee un índice glucémico muy bajo y tiene un gran poder saciante, así que tomado antes de las comidas nos ayudará disminuir las raciones y entre comidas evita que piquemos alimentos que no nos convienen.
Su contenido en fibra es muy elevado, lo que lo convierte en un aliado muy eficaz contra el estreñimiento. Además es un potente antioxidante, son aconsejables para combatir y reducir el ácido úrico, estimula la regeneración celular y reduce las cantidades de azúcar en sangre.
Entre las propiedades de los altramuces destacan su aporte en hierro, calcio, zink, potasio, fósforo, magnesio, vitamina E y vitaminas del grupo B.
¿Cómo beneficiarnos de las propiedades de los altramuces?
La forma más habitual en la que podemos encontrar los altramuces en el super mercado es ya preparados en salmuera, de este modo podemos consumirlos directamente como aperitivo o como picoteo, y aguantan varios días en la nevera. Pero también puedes comprarlos crudos y cocerlos como cualquier otra legumbre y preparar con ellos sopas, potajes o ensaladas.
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