¿Qué es la alcachofa?
Sabemos que a muchas personas les cuesta comer verdura. Parece que enfrentarse a un plato de estos verdes alimentos supone un castigo, un reto por el que están obligados a pasar. Menos con la alcachofa. La alcachofa, con su sabor delicioso, reconcilia incluso a quienes tienen hábitos gastronómicos poco saludables. La alcachofa es el toque magistral de cualquier guiso que confiere un toque único. ¿Estáis empezando a quererla un poco más? Pues esperad a saber sus múltiples propiedades.
La alcachofa tiene el nombre científico de Cynara scolymus y pertenece a la familia de las Asteraceae. Su planta suele crecer en regiones de climas templados y podemos recolectarla en invierno. En este punto, conviene destacar que lo que comemos al ingerir alcachofa es, en realidad, la flor, algo que ya podíamos sospechar por los pétalos que presenta.
La historia de la alcachofa
La alcachofa es otra de esas deliciosas hijas de la gastronomía mediterránea a la que tanto debemos. Se cree que su origen radica en el este de África aunque su conocimiento y su cultivo se extendió pronto por el sur de Europa, pues de hecho, griegos y romanos ya la conocían y empleaban. Eso sí, por aquel entonces, sólo se comían los tallos.
Durante la Edad Media, era considerado un manjar, no apto para todos los bolsillos. Una de las valedoras de esta simpar verdura fue la famosa Catalina de Medici, que la consumía en altas cantidades.
¿Por qué es buena la alcachofa?
Además de por su sabor, la alcachofa está considerada una de las verduras más saludables que podemos llevarnos a la boca. A continuación, un repaso por algunas de sus virtudes.
Seguro que más de una vez habéis oído hablar de la dieta de la alcachofa. La verdad es que esta verdura está más que recomendada para todos aquellos que quieren perder unos cuantos kilos. Esto se debe a que es baja en calorías y además, presenta una gran cantidad de fibra. Tiene también cinarina, un principio con propiedades coleréticas que ayuda a expulsar las bilis y, por tanto, las grasas de nuestro organismo.
Así que, evidentemente, la alcachofa también puede ayudarnos si nuestro problema es el colesterol, pues ayuda a metabolizar las grasas. Su consumo previene la arteriosclerosis y las enfermedades vasculares. También favorece que un paciente que ha sufrido un infarto o una angina de pecho pueda recuperarse más rápidamente.
Puede que una de las propiedades más reconocidas de la alcachofa sea su protección para el hígado. De nuevo hemos de hablar de la cinarina, pues es ella la que ayuda a la función biliar y a la digestión de las grasas. Si existen problemas de piedras en la vesícula o gases, el consumo de esta verdura podrá ayudarnos. Por si fuera poco, contiene los ácidos cafeico, linoleico y oleico, que también cuidan de nuestro hígado y favorecen las digestiones. Y ya que contiene tanta fibra, puede ser ideal para tratar el estreñimiento.
Para quienes sufren de diabetes, la alcachofa no puede faltar en su dieta. Facilita el control de la absorción de hidratos de carbono. La inulina, la fibra de este vegetal, es también ideal para rebajar los niveles de azúcar.
Muchos también emplean la alcachofa por sus poderes diuréticos. Esto se debe a que contiene potasio, por lo que elimina toxinas de una manera muy sencilla.
Variedades de alcachofa
Entre los diferentes tipos de alcachofa que existen, vamos a repasar los más conocidos.
- Alcachofa Camus de Bretaña: es una variedad de gran tamaño.
- Alcachofa verde de Laon: resiste mejor las bajas temperaturas.
- Alcachofa violeta de Provenza: de tamaño pequeño, las brácteas son violetas.
- Alcachofa blanca de Tudela: muy popular en España.
- Alcachofa espinosa: ideal para comer cruda.
Tabla nutricional de la alcachofa
Valores medios | Por 100 g |
---|---|
Calorías | 47 kcal |
Lípidos | 0,2 g |
Sodio | 94 mg |
Potasio | 370 mg |
Glúcido | 11 g |
Fibra alimentaria | 5 g |
Azúcar | 1 g |
Proteína | 3,3 g |
Vitamina A | 13 IU |
Calcio | 44 mg |
Vitamina C | 11,7 mg |
Hierro | 1,3 mg |
Magnesio | 60 mg |