Los ictus pueden dejar secuelas. Si son pequeños, las secuelas son mínimas, y llegan a desaparecer con unos meses de rehabilitación.
Pero si las secuelas que dejó son mayores, quizás la persona se sienta abrumada por la pérdida de capacidad para realizar las cosas que hacía antes, y haya que hacer algunos reacomodos de la vida.
Te interesará conocer: Otras informaciones muy útiles sobre los ictus
La rehabilitación brinda grandes oportunidades de mejorar el desempeño diario y, con algunos cambios, mantener una cierta independencia. La incapacidad puede generar complicaciones, que también la rehabilitación ayuda a paliar.
Toda esta nueva situación puede crear frustración y tristeza, pero la rehabilitación, un poco de voluntad y de disciplina harán que las cosas mejoren.
Contenido
¿Por qué debo hacer rehabilitación?
Las habilidades que se perdieron o quedaron dañadas con el ictus, se recuperan bastante con un buen programa de rehabilitación. Puede ser un proceso largo, y frustrante en ocasiones. El tiempo de rehabilitación dependerá del estado de salud previo al ictus y de la magnitud de las secuelas que dejó.
Las personas necesitarán diferentes tiempos para recuperar las funciones dañadas. Las grandes mejorías se consiguen en las primeras semanas o meses. Las mejorías siguientes son más lentas en lograrse.
Las personas pueden llegar a recobrar las habilidades para la realización de las actividades de la vida diaria, como son el comer, caminar, hablar, y cuidar de uno mismo. La terapia ocupacional ayuda mucho en la recuperación de las habilidades manuales.
Quizás para algunas tareas más complejas, se necesite algún tipo de ayuda externa, ya sea de otra persona o de ayudas técnicas como bastón o andador.
Es común que en los meses siguientes a un ictus, las personas sufran de depresión por las habilidades perdidas. Superar esta depresión es uno de los objetivos de la rehabilitación.
¿Dónde puedo hacer la rehabilitación?
En la gran mayoría de los casos la rehabilitación se puede realizar en el hogar con un plan y revisiones periódicas de un fisioterapeuta. En ocasiones, al inicio es conveniente por una o dos semanas realizarlas en un centro de salud para dar un “empujón inicial” a la persona que se rehabilita, y después continuar en el hogar.
Este tiempo en el hospital tras el ictus está relacionado con:
- La capacidad que tiene de cuidarse por sí mismo.
- En caso de que necesite ayuda, de cuánta dispondrá en su hogar.
- La seguridad de la casa para recibirlo a usted con algunas habilidades disminuidas.
¿Qué puedo tener alterado y cómo hacer para mejorarlo?
Producto del ictus, se pueden afectar diferentes funciones del cuerpo, y esto estará en dependencia de la zona del cerebro afectada y de la magnitud del daño producido. Estos cambios pueden estar relacionados con el movimiento de una parte del cuerpo, comer, hablar, ver, orinar, caminar, tomar objetos con la mano o escribir.
También se puede afectar la memoria y el comportamiento de las personas, así como su estado de ánimo. Se verá a continuación los más importantes y qué se puede hacer para mejorar.
Movimiento
Hacer las actividades diarias de la casa, caminar dentro de ella, puede ser más difícil. En muchas ocasiones, un lado del cuerpo se queda más débil, lo que dificulta utilizar bien el brazo y la pierna de ese lado. Se conoce como hemiplejia.
Estas dificultades pueden ocasionar dolores en las articulaciones, que se pueden poner rígidas por el poco movimiento. La persona que esté guiando su rehabilitación le ayudará a aprender de nuevo cómo usar las partes paralizadas. El ejercicio físico de los miembros afectados mejorará la fuerza muscular y la coordinación del movimiento.
Ponerse y quitarse la ropa y los zapatos puede ser difícil. Use ropa con velcro y zapatos son cordones, son más fáciles de usar. Hay calzadores con mango largo muy útiles para quienes no se pueden agachar a calzarse los zapatos.
Es posible que por un tiempo o permanentemente usted tenga que utilizar bastón, andador, o silla de ruedas. Muchas personas logran bastante independencia para las cosas que realiza diariamente.
Quizás a la casa haya que realizarle algunas modificaciones para aumentar su seguridad en ella. Hay cambios que se pueden realizar para evitar caídas.
Debe evitar las lesiones en la piel que se producen por estar acostado o sentado sin moverse.
Para comunicarse con los demás
Hablar o entender a los demás se puede afectar. Es posible que se necesite más tiempo para contestar. Tómese el suyo. Utilice frases cortas. En los ambientes ruidosos puede ser más difícil la comunicación. Mire a los ojos a las personas, será más fácil hablar y escuchar.
Si es necesario, un logopeda o especialista del habla puede ayudar mucho con ejercicios sencillos. Hay otras formas de comunicarse además de la palabra. Aprenda otras maneras. Recuperar el habla puede demorar más de un año.
Si se presentan dificultades para tragar cuando se come o bebe
Comer alimentos sólidos o tomar líquidos puede ser difícil. Los principales síntomas que esto producen son toser cuando se está tragando, y puede llegar a la falta de aire. Además, puede producirse ruidos en la garganta después de haber comido, esto es porque se queda comida acumulada sin tragarse en la parte baja de la garganta. Puede aparecer hipo.
Todo esto puede traer como consecuencias que la persona se desnutra por alimentarse mal, y puede provocar neumonías por aspiración de alimentos.
Debe masticar lentamente, no llevarse grandes bocados de comida a la boca. Cuando los líquidos son los causantes de los mayores problemas, si se espesan pueden tolerarse mejor. Los purés o papillas pueden ser parte de la solución. Estos alimentos deben ser ricos en calorías para que la persona no se desnutra.
Ir al baño
Los actos de orinar o defecar pueden alterarse. Hay varias cosas que se pueden hacer:
Si lo tenía y lo perdió, debe volver a hacerse un hábito para defecar. Ir al baño a la misma hora y frotarse el estómago ayudan. Sea paciente, puede tardar más de lo habitual.
Trate de evitar el estreñimiento comiendo suficiente fibra dietética y tomando más líquidos. Recuerde que algunas de las medicinas que toma pueden agravarlo. Pregúntele a su médico.
La orina puede tener dificultades por el mismo daño de la enfermedad en los músculos que intervienen en el acto de orinar, porque no le da tiempo de llegar al baño, o porque no se da cuenta de que debe orinar.
Crearse un hábito, como por ejemplo ir cada dos horas al baño y orinar aunque no se tenga deseos ayuda. A veces no queda más remedio que usar aditamentos como colectores de orina o pañales. En pocos casos se necesita sonda vesical permanente.
Capacidad mental
Pueden ocurrir cambios en la capacidad de razonar y en el comportamiento, memoria y trastornos del sueño.
También puede haber sentimientos de tristeza y depresión por la nueva situación. En la medida que mejore, estos sentimientos disminuirán. Cuando comience a mejorar, trate de tener una vida social más activa. A veces los medicamentos ayudan. Consulte al médico.
Otros aspectos importantes en su vida
A veces las secuelas son por largo tiempo, y se necesitan cambios en la casa para mejorar la calidad de vida de la persona enferma y de sus cuidadores.
- Ajustes en el baño, la cama, mover los muebles para crear espacios de paso sin dificultad ni peligro, uso de pasamanos, pueden ser necesarios.
- Conversar con la familia puede ser muy bueno para una mayor comprensión.
- Debe tener cuidado con los medicamentos que consume. Un pastillero ayuda al manejo de los mismos, así como recordatorios bien visibles.
La rehabilitación después de un ictus es posible…
Sigue leyendo: ¿Qué puedo hacer para recuperarme después de un ataque al corazón?