Los remedios caseros o remedios naturales nunca pasan de moda. Muchos decimos que acudir a la «botica de la abuela» siempre es una gran idea y, aunque no vamos a despreciar el indudable poder la de Medicina moderna (imprescindible en la mayoría de los casos), es cierto que más veces de las que pensamos podemos tirar de elementos naturales para solventar nuestros problemas de salud. Muchas son las personas que tienen en casa un botiquín de herbolario, es decir, un botiquín con algunos ingredientes naturales de los que echar mano cuando necesitamos una ayudita.
Si no sabes por dónde empezar, te contamos cuáles son los 5 básicos que no pueden faltar en tu botiquín natural.
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5 ingredientes básicos para tu botiquín de herbolario
Poleo:
Tener poleo en tu botiquín de herbolario no solo te ayudará a tratar las afecciones del estómago, su uso más extendido y conocido, si no que también nos sirve para uso tópico de la piel. Por ejemplo, si queremos evitar infecciones, tratar una picadura de mosquito, cicatrizar antes una herida o, como ya hemos dicho, ofrecernos soluciones para el estómago ante casos de digestiones pesadas, dolor de barriga, gases o incluso alguna molestia menstrual, el poleo es una opción estupenda.
Valeriana:
Aunque hablemos de «botiquín natural», con la valeriana haremos una pequeña excepción. Y es que lo más recomendado (e imprescindible, no nos vamos a andar con medias tintas), es que la consumamos tal y como la venden en herbolarios o supermercados. La valeriana al natural, sin procesar, nos puede aportar más inconvenientes que ventajas, por su dureza, por lo que nunca te recomendaríamos tomarla así.
¿Para qué nos puede servir? Principalmente, la valeriana nos ayuda a conciliar el sueño y relajarnos. Si estás atravesando una etapa de nervios o si simplemente no puedes dormir bien por un desajuste horario o porque te notas más intranquilo (o porque un día has abusado de la cafeína), termina el día tomándote una valeriana antes de ir a dormir y ya verás como agradeces tener este botiquín de herbolario en casa. Se acabó el contar ovejitas.
Orégano:
El orégano, un ingrediente fundamental en nuestras recetas de pasta, pizza e incluso carnes, también es un básico en nuestro botiquín natural. Nos puede servir para un montón de usos, pero sobre todo para lo relacionado con los oídos. Otitis, picor, dolor… sea lo que sea, el orégano es uno de los ingredientes más indicados para aliviar nuestros oídos. ¿Cómo utilizarlo? Muele las hojas frescas de orégano, extrae su jugo y aplica un par de gotitas en ellos. Notarás la diferencia en un par de aplicaciones.
Jengibre:
El jengibre es un viejo conocido en nuestro blog. Con él, se pueden preparar un montón de recetas que nos aportarán, además de un sabor incuestionable, una buena masa de propiedades y nutrientes. Pero además de ser un excelente aderezo para nuestras comidas, también nos ayudará en nuestra salud con cuestiones como las náuseas o mareos, ya sea por un embarazo o por un viaje en coche, por ejemplo. Para que surta efecto, solo tendremos que tomar una cápsula de jengibre o, para un uso más natural, una infusión que contenga un par de cucharaditas del mismo.
Regaliz:
El regaliz es muy bueno para aliviar cualquier dolor relacionado con la garganta. Por ejemplo, si tenemos picor, si está irritada, si hemos cogido frío o simplemente si hemos pescado un buen resfriado. Mastica un poco de raíz de regaliz y notarás los efectos al momento. Muy efectivo.
Y tú, ¿qué otras cosas tienes en tu botiquín de herbolario?
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