Los peligros de la obesidad van mucho más allá de cuestiones estéticas o de modas. El sobrepeso es un enemigo directo de la salud y puede acarrearnos consecuencias a corto, medio y largo plazo que podríamos haber evitado deshaciéndonos a tiempo de esos kilos que comenzaban a acumularse o buscando un remedio efectivo en caso de las personas que sufren sobrepeso por genética o desde la infancia.
Si el sobrepeso se transforma en obesidad, no podemos restarle importancia, ya que las consecuencias podrían desembocar incluso en la muerte. Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) los casos de obesidad se han disparado entre los años 1980 y 2014. En nuestras manos está ponerle remedio mediante un mayor cuidado de nuestra alimentación, respetar los horarios básicos vitales y acudir a un endocrino o nutricionista cuando la causa del sobrepeso sea genética o por algún problema derivado de la salud.
Hoy te vamos a hablar de tres grandes problemas que van vinculados a los peligros de la obesidad.
Problemas cardiacos
Uno de los principales peligros de la obesidad está relacionado con el corazón. La acumulación excesiva de grasa y placa es uno de los mayores causantes de infartos y ataques cardíacos de nuestros días. Consumir un exceso de alimentos ricos en grasas saturadas, fritos y precocinados actúan como una bomba de relojería contra nuestro corazón.
Además, las personas que sufren los peligros de la obesidad suelen tener un ritmo de vida sedentario, lo que también impide que el corazón mantenga una vida sana y acorde con la edad del sujeto.
Problemas musculares y óseos
Los huesos son los primeros que sufren ante casos de sobrepeso. Razones lógicas nos llevan a afirmar que nuestro sistema óseo no debería pasar de los kilos recomendados para cada persona en función de su edad y altura. Las rodillas y la espalda son quienes más padecen los asuntos del sobrepeso, ya que tienen que soportar una carga excesivamente grande para la que no están preparadas.
Por otra parte, no solo los huesos padecen los peligros de la obesidad. El tejido muscular también sufre un desgaste mayor si nuestro peso no se corresponde con el ideal.
Problemas sanguíneos
El tercer gran problema vinculado con los peligros de la obesidad tiene como afectado a nuestro sistema sanguíneo. El colesterol y los triglicéridos se multiplican en casos de personas con sobrepeso; por otra parte, un déficit de calidad de nuestra sangre hace que no filtremos y recojamos correctamente los nutrientes que adquirimos mediante la alimentación.
La hipertensión y la diabetes también son enfermedades que pueden ser provocadas por el sobrepeso.
Cuidar nuestro cuerpo no es solo un capricho estético. Es muy importante que seas consciente de los peligros de la obesidad y pongas remedio antes de que sea demasiado tarde. Acude a un doctor que te ayudará a identificar la causa de tu problema de peso y da el primer paso para mejorar tu calidad de vida. Tu cuerpo, tu mente y tu salud te lo agradecerán.