Gastroenteritis es una infección que ocasiona inflamación del estómago y de los intestinos, tanto el grueso como el delgado, causada por bacterias, virus y parásitos.
¿Cuáles son los síntomas de la gastroenteritis?
Las manifestaciones son extraordinariamente variadas y muy heterogéneas debido a la gran versatilidad teniendo en cuenta el origen, es decir el agente causal y complicaciones en un mismo paciente. La enfermedad suele ser leve o moderada, y el 90 % de las personas afectadas no requieren de ingreso hospitalario durando las manifestaciones entre 24 a 48 horas.
Entre los síntomas más frecuentes encontramos:
- Fiebre
- Diarrea acuosa
- Náuseas
- Vómitos
- Deshidratación
- Pérdida del apetito
- Pérdida de peso
- Cólicos
¿Qué puede causar gastroenteritis?
En la tabla siguiente exponemos algunas de las fuentes contaminantes y los agentes causales de la gastroenteritis aguda. Nótese que en la mayoría de los casos la vía de contaminación es a través de los alimentos que ingerimos, lo que traduce la necesidad e guardar estrictas medidas de higiene en la manipulación de estos en función de evitar la afectación por gastroenteritis.
También se considera que un gran número de personas que presentan gastroenteritis son debidas a determinados virus, como son Coronavirus, Calicivirus, Enterovirus, ECHO virus, Agente de Norwalk, Virus Coxsackie A, Adenovirus, Astrovirus y Rotavirus entre otros.
La gastroenteritis viral se caracteriza por ser altamente contagiosa, y la mayoría de las personas afectadas se recuperan sin mayores dificultades. Una clave para evitar las complicaciones consiste en beber suficiente cantidad de líquidos para reemplazar las perdidas, como es el caso de niños pequeños, y adultos mayores.
Otro grupo susceptible a las gastroenteritis virales son aquellas personas que tienen inmunosupresión, es decir, un sistema inmunológico debilitado.
La gastroenteritis viral se contagia mediante el contacto directo con personas infectadas aunque también es posible que ocurra al ingerir alimentos o bebidas contaminadas.
Otra causa frecuente de gastroenteritis son los parásitos. Entre estos encontramos la gastroenteritis ocasionada por el parásito Giardia Lamblia, que se disemina con facilidad a través del contacto de persona a persona y mediante el agua contaminada, incluyendo piscinas, parques acuáticos, arroyos y lagos.
Una característica distintiva de este parasito es su resistencia al tratamiento con cloro.
¿Cómo evitar la gastroenteritis?
La mejor forma de no afectarse por gastroenteritis es evitar las posibilidades de contagio. Y esto se logra mediante medidas de protección de las fuentes y sistemas de distribución del agua potable.
Otro elemento sustancial es educar a la población en general, y muy en particular a los llamados grupos de alto riesgo sobre los hábitos higiénico personales y colectivos. Dentro de esto se debe hacer hincapié en notificar las personas afectadas de gastroenteritis.
Si estas afectado ¿que debes hacer?
Como hemos apreciado entre las manifestaciones más severas se encuentra la deshidratación, sobre todo en niños y ancianos. De ahí que este debe ser el primer aspecto a considerar en el tratamiento: la rehidratación del paciente y la corrección del desequilibrio hidromineral. Al respecto resulta muy útil el uso de las sales de rehidratación oral (SRO), aconsejándose tomar un vaso por cada diarrea líquida que presente. Al respecto resulta aconsejable tomar líquidos ricos en calorías y electrólitos, es decir sales minerales del tipo del sodio y el potasio.
La dieta debe estar relacionada con el periodo de evolución de la gastroenteritis, aunque en términos generales no se debe limitar la ingestión de alimentos, excepción hecha de los casos graves.
De cualquier manera de forma general se debe evitar comer alimentos ricos en fibras, grasas y condimentos, pues de esta forma se aumenta la motilidad intestinal y el volumen de las heces. A su vez no se debe tomar leche ni sus derivados. Otra medida está relacionada con prohibir la ingestión de bebidas irritantes, como son el café fuerte, chocolate, alcohol ni bebidas gaseosas que incrementan cólicos y diarreas. Es aconsejable tomar jugos de frutas así como alimentos blandos de fácil digestión.
En menos del 10 % del total de personas con gastroenteritis resulta aconsejable el uso de tratamientos con antibióticos o fármacos antimicrobianos.
De forma general e inespecífica se aconseja usar:
- Productos contra la motilidad intestinal, como son: codeína, elixir paregórico, loperamida y difenoxilato.
- Opiáceos: estos reducen la secreción de líquido, aumentando la absorción.
- Sustancias inertes y absorbentes, entre las que se encuentran: caolín, pectina, carbón, subsalicilato de bismuto.
No obstante, frente a las primeras manifestaciones de gastroenteritis debes acudir a tu médico. ¡Un accionar oportuno puede evitar males mayores!