La vitamina D también conocida como la vitamina del sol, juega un papel esencial en nuestra salud. Sin embargo, no hay que abusar de ella, de lo contrario corremos riesgo a sufrir los efectos secundarios de la vitamina D.
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Beneficios de la vitamina D
La vitamina D es una de las vitaminas esenciales para nuestro organismo, puesto que cumple funciones tan importantes como ayudar a la absorción del calcio y homeostasis del fósforo para fortalecer nuestros huesos y dientes.
Aunque también cumple funciones importantes en el sistema inmune, endocrino y cardiovascular.
De donde se obtiene la vitamina D
Esta vitamina se sintetiza de manera natural cuando nuestra piel está expuesta a los rayos del sol, por ello se la conoce como la vitamina del sol. Es entonces metabolizada en el hígado y riñones.
Pero también se la obtiene de algunos alimentos como las sardinas, caballa, anguila, arenque, yemas de huevo, carne de res cocida, hígado, aceite de hígado de bacalao y ciertos tipos de hongos.
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Cómo actúa la vitamina D
La vitamina D es soluble en grasa, por lo tanto se almacena en el tejido graso de nuestro organismo. Las vitaminas solubles en agua son absorbidas por el torrente sanguíneo y cuando hay en exceso son eliminadas a través de la orina. Minimizando cualquier complicación por toxicidad.
En cambio, cuando hay un exceso de vitaminas solubles en grasa, éstas se almacenan en el cuerpo, dando lugar a ciertos efectos secundarios. Por eso es necesario conocer la dosis recomendada y tomarla con moderación.
Dosis diaria recomendada de vitamina D
Según la Universidad de Oregon la dosis diaria recomendada de vitamina D es la siguiente, según las edades:
Edad | μg/día (UI/día) |
---|---|
0-12 meses | 10 μg (400 UI) (IA) |
1-70 años | 15 μg (600 UI) |
71 años y más | 20 μg (800 UI) |
Embarazo | 15 μg (600 UI) |
Período de lactancia | 15 μg (600 UI) |
Efectos secundarios de la vitamina D
La toxicidad por vitamina D nunca será a causa de una exposición solar excesiva. Solo se puede sufrir efectos secundarios de la vitamina D al ser suministrada por suplementos.
Dado que la vitamina D ayuda a regular los niveles de calcio y fósforo en la sangre, una sobredosis de esta vitamina puede generar una calcificación de los tejidos blandos de nuestro cuerpo. También si no es tratada durante un largo periodo la calcificación de órganos como los riñones y el corazón.
Una sobredosis podría también conducir a una excesiva producción de orina, obligando a la persona a levantarse varias veces a la noche para orinar.
La hipercalcemia, es decir, niveles elevados de calcio en la sangre es uno de los efectos secundarios de la vitamina D. Los síntomas de esta complicación es sentir sed excesiva, náuseas, debilidad muscular, dolor en abdomen, calambres musculare, confusión o letargo.
Una sobredosis de vitamina D también puede aumentar el riesgo de contraer enfermedades coronarias o presión arterial alta.
Deficiencia de la vitamina D
La deficiencia de la vitamina D puede aumentar el riesgo de contraer enfermedades tales como el raquitismo en niños. Que se caracteriza por deformidades óseas típicas.
En adultos, la deficiencia de esta vitamina, hacen que sean más propensos a la osteomalacia. La cual se caracteriza por el debilitamiento de los músculos y los huesos, causando dolor en huesos, músculos y articulaciones.
Otras afecciones de nuestra salud también están relacionadas con la vitamina D, como la obesidad, pigmentación de la piel o la enfermedad intestinal inflamatoria.
La diabetes tipo 2 puede ser una de las consecuencias de la deficiencia de la vitamina D, porque puede obstaculizar la producción de insulina en el cuerpo.
El sistema nervioso también está relacionado con la vitamina D, por lo tanto, la deficiencia de dicha vitamina puede desencadenar problemas psicológicos. La depresión, esquizofrenia o trastorno afectivo estacional son algunos de ellos. Ésta última afección puede ser mejorada con suplementos o terapia de luz.
Factores de riesgos de la deficiencia de vitamina D
Condiciones ambientales
La piel recibe los rayos UVB del sol, y esa radiación depende la contaminación del aire y presencia de nubes. Pero además, depende de la ubicación geográfica y los cambios estacionales.
Estilo de ropa
Justamente por las estaciones podemos cubrir más o menos nuestra piel del sol. El algunos países, por razones religiosas o culturales cubren toda su piel del sol, por lo que puede afectar a la recepción de la vitamina D.
Protección solar
Sabemos que las radiaciones solares también hacen daño a determinadas horas del día. Por lo tanto, seguimos algunas prácticas saludables como usar protector solar. Sin embargo, el bloqueador solar, sombreros y prendas obstaculizan la exposición de la piel al sol. Por lo tanto, nuestra piel no alcanza a sintetizar la vitamina D.
Infantes amamantados
Aunque la leche materna provee entre 10-80 Ul de vitamina D, es necesario, un suplemento de esta vitamina. Especialmente si tiene piel oscura o recibe poca exposición solar.
Tienes que tener en cuenta que además de cuidar que no nos falte, tampoco tenemos que sufrir de una sobredosis. Porque pasaremos por los efectos secundarios de la vitamina D. La moderación tiene que estar en todo sentido de nuestra vida para disfrutar de una excelente salud.
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