Tener el pene torcido es mucho más común de lo que imaginas. No estás solo en esto. Ni tienes por qué avergonzarte (al fin y al cabo no es culpa tuya). Se considera que un pene está torcido cuando, en mita, se curva hacia algún lado en vez de seguir recto. La curvatura puede ser hacia arriba, hacia abajo o a los lados. Y depende de lo grave que sea puede tener un ángulo mayor o menor. Cada pene es un mundo, incluso si está torcido. Puedes averiguar qué lo causa y cómo remediarlo.

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Tener el pene torcido es un grave problema

Quizás el problema más comunes que tienen los chicos se da en la forma del pene. En concreto que esté torcido. Tener el miembro un poco doblado no es una enfermedad ni un problema. Cada uno lo tiene como le ha tocado y no hay dos iguales. El embolado aparece cuando la curvatura es demasiado pronunciada.

A muchos hombres les avergüenza ir al médico para preguntar por sus partes íntimas. En vez de eso buscan por internet, que es fácil y anónimo, y se pueden encontrar con cosas muy feas. No es de extrañar que coincidan nuestros «síntomas» con los de enfermedades muy graves. Y puedes obsesionarte demasiado con algo que puede estar bien. Por eso aquí te contamos en qué te tienes que fijar realmente, para que no te preocupes de forma innecesaria.

¿Cómo saber si tienes la enfermedad del pene torcido?

A la enfermedad de tener el pene con un ángulo extraño se le llama Síndrome de Peyronie. El mayor síntoma para diferenciar si tu curvatura es «normal» o no, no es visual, lo puedes saber cuando tienes una erección. Si tienes el síndrome de peyronie las erecciones son dolorosas y las relaciones sexuales son casi imposibles.

La curvatura del pene se produce de forma natural. En una pared del cuerpo cavernoso que forma el pene se puede formar un queloide. El queloide es una especie de cicatriz, que hace que el tejido se endurezca y no sea flexible. Esa cicatriz «tira» del pene impidiendo que esté recto.

¿Cómo se arregla un pene torcido?

Si es un caso muy grave la cirugía te puede ayudar a resolver el problema. Pero antes de llegar a ese extremo, puedes realizar masajes para aliviar el pene torcido.

Para hacer estos masajes, es muy importante que el pene no esté en erección, para que sea mucho más fácil y no cause dolor. También hay que intentar que esté caliente, para que se dilaten los cuerpos cabernosos que lo forman. Para conseguirlo puedes utilizar una toalla que esté caliente y enrollada, o aprovechar para darte un baño caliente y disfrutar más el masaje. (Pero no lo «disfrutes» disfrutes mucho, recuerda que no puede haber erección).

Una vez estás preparado, es el momento de dar el masaje. Lo único que tienes que hacer es doblar el pene en el sentido contrario a donde está torcido. Así poco a poco esa dureza irá cogiendo elasticidad y la curva será menor.

¡Atención! Mientras realizas el masaje no debes de sentir nada de dolor. Si te duele tienes que ir al médico. Te recomendará otro tipo de masaje o lo que sea mejor para tu caso.

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